jueves, 23 de octubre de 2014

La incredulidad nos lleva a la mediocridad


Decía Bertrand Russell, filósofo y matemático británico, que la mejor prueba de que algo puede hacerse es que otra persona ya lo haya hecho antes”. Si es así, nuestro mayor “activo” es nuestra capacidad y deseo de aprendizaje.
Francisco Alcaide recoge de forma magistral en su libro “Aprendiendo de los mejores” cientos de reflexiones de más 50 personalidades de renombre mundial y que nos ayuda a poder contestar a la pregunta: ¿cuál es la mejor forma de conseguirlo?
La verdadera cuestión no es preguntarse si algo es posible o no, sino preguntarse cómo  se puede conseguir. Ya lo decía la psicoterapeuta Virginia Satir: “siempre hay esperanza para cambiar y oportunidades para ello…porque siempre hay oportunidades para aprender.
Para aprender sólo se necesita una cosa: HUMILDAD. ¿Por qué? Porque aprender implica admitir que hay algo que no sé pero que deseo saber. Para ello hay que pedir ayuda y eso, queridos lectores, no se estila hoy en día. Es más, está visto como un rasgo de debilidad. Realmente, es justo lo opuesto. Cuanto más humilde, más fuerte e influyente.

jueves, 16 de octubre de 2014

¿Por qué vendes? La Ley del ICEBERG


En un mundo donde lo que prima es la impaciencia por conseguir números rápidos o ventas jugosas (la foto a corto plazo) es muy fácil quedar imbuido en esta necesidad de la "prontitud" de los resultados. Cuando esto ocurre, sólo tenemos dos puertas a elegir: dejarse llevar y  perder el  propósito de por qué uno se dedica a lo que se dedica o ser paciente y aguantar las corrientes para después convertirte en luz.

Uno llega a veces a preguntarse.. ¿Por qué estoy en el mundo de las ventas?. ¿Qué representa hoy este mundo en la sociedad en que vivimos? No nos engañemos…si dices a alguien que te dedicas a “vender" o que eres comercial (palabra detestable) rápidamente se disparan todas las alertas que hacen ponerse a los demás “en guardia ".

Hoy, vender en sí, ya  genera desconfianza. Sin confianza…no se puede dar la venta. Si es así…¿no parece de locos dedicarse a esta hermosa profesión?.
Sólo el 10% es visible


 Todd Duncan  lo describe perfectamente en su “ley del Iceberg” (Ventas de alta confiabilidad) donde uno puede apreciar con agrado que nada está perdido en esta profesión si se mantiene vivo un propósito “estable y fiable” que le lleva a vender con entusiasmo.

Duncan recalca que la verdadera medida de nuestro éxito es invisible para nuestros clientes
En ventas, la realización personal y no el dinero, debe ser la que determine si estás consiguiendo  un verdadero éxito. (Entendiendo por éxito ser realmente rico, esto es, no depender del dinero para ser feliz)